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Internacionalización para Organizaciones sin Ánimo de Lucro

Estrategia multinacional

La estrategia multinacional es un enfoque de la internacionalización que centra los esfuerzos de la organización, así como el uso de sus recursos, en las necesidades locales de cada zona específica por separado, en lugar de adoptar un enfoque global o estandarizado. Esto significa que la organización estudia esas necesidades específicas de esa zona, región, ciudad y país, y crea un proyecto a partir de esto, teniendo en cuenta también sus factores culturales y sociales.  Con este enfoque, la organización hace un gran esfuerzo para adaptar su trabajo a esas necesidades y trata de involucrar a la población local en lugar de a un público más amplio.

Para que una estrategia multinacional tenga éxito es fundamental invertir recursos en la investigación local, lo que contribuye a un aumento temprano de los gastos. No obstante, este enfoque proporcionará una información increíblemente valiosa sobre las necesidades de esa zona específica, y trae consigo la posibilidad de alcanzar los objetivos de tu organización y el proyecto específico que se está llevando a cabo en esa zona. No obstante, se sacrifica la eficiencia en el uso de los recursos, lo que convierte esta estrategia en la más cara de gestionar.

Foto de Robert Collins en Unsplash

Al tomarse el tiempo para aprender a conectar con los habitantes de un lugar y conocer sus necesidades, es posible utilizar la estrategia multinacional para crear una amplia gama de tácticas que pueden adaptarse a zonas y regiones que comparten muchas similitudes. Los principales defectos de esta estrategia son los enormes costes de investigación que deben realizarse al principio del proyecto de internacionalización. Además, nada asegura que esta investigación dé resultados positivos, ya que su trabajo puede no ajustarse a las necesidades de esa zona específica, y todo el esfuerzo y los recursos puestos en la investigación serían “desperdiciados”. No obstante, estos gastos serían menores que si se iniciara la internacionalización sin ninguna investigación previa y el proceso fracasara como resultado.

Esta estrategia es la que mejor se adapta a las pequeñas organizaciones que quieren extender su actividad a uno o unos pocos países, para lo que no necesitarían mucha capacidad en cuanto a recursos o finanzas.